miércoles, 13 de enero de 2016

biofertilización vs síndrome monsanto

por Eduardo Marin - En la práctica cómo hacer frente al síndrome agro-químico (monsanto) con la bioquímica natural – válido en pequeñas y medianas extensiones para aplicar la biofertilización

Las lógicas del Buen Vivir, soberanía alimentaria y aplicaciones ecologistas de la biodiversidad forman opuestos frente al monocultivo, la cruda 'rentabilidad', el uso de agro-químicos y la aplicación de alteraciones genéticas en los productos agrícolas destinados al 'gran' mercado mundial de alimentos globalizado que a su vez mueve el mercado trasnacional tóxico de agroquímicos, abonos y plaguicidas

Según constatan las milenarias prácticas agrícolas ancestrales la naturaleza se fertiliza a sí misma mediante procesos biológicos... que en etapas recientes la ciencia altera en favor del establecimiento de los mercados globalizados de alimentos y agro-químicos en manos de grandes empresas trasnacionales

Esas dinámicas de mayor lucro por encima del daño ecológico que generan es 'válido' para las economías de escala trasnacional pero en su accionar 'arrastran' y empobrecen al sector agrícola en todos los países dependientes de la tecnología y políticas trasnacionales impuestas desde arriba

En la crisis actual globalizada surgen una serie de iniciativas empresariales, sociales, comunitarias y familiares que apuntan todas, en la práctica, a hacer frente al que se denomina síndrome monsanto o dependencia por los agro-químicos

Los pequeños productores tienden a 'construir' una ecuación en la que x toneladas de agro-químicos deben ser sustituídas por x toneladas de abonos orgánicos... y en ese sentido se deja de lado el poder de autofertilización y de control de plagas con que cuenta la naturaleza a través de sus propios procesos biológicos

Esa fundamental omisión afecta a los pequeños productores y los irriga mediante los aparatos nacionales, regionales y locales que difunden tecnologías agrícolas foráneas, alineadas a la agenda trasnacional dominante pero obviamente inapropiadas para lograr alimentos de mejor calidad, con procesos productivos sostenibles que mitiguen y corrijan los múltiples desequilibrios bio-ecológicos que hoy sufre el planeta y están asociados al cambio climático y a otros daños derivados

iniciativas desde el universo campesino: indígenas, negros y agro-descendientes comunitarios

Las más significativas experiencias incluyen prácticas complementarias y pro-diversidad que se basan en 1) la plantación de arboledas como cubierta natural o sombrío de cultivos, 2) el manejo de plantas benéficas (malezas) para fertilización y control de plagas, y 3) la siembra de cultivos intercalados o asociados que sustituyen al monocultivo manipulado desde la agenda trasnacional

Otras iniciativas masivas y de amplio impacto territorial por su carácter comunitario y familiar se basan en los mismos principios bio-lógicos que iluminan el manejo de lombrizarios y la producción de fertilizantes a partir del uso de los más diversos desechos orgánicos aplicadas en pequeños huertos y hasta en huertas verticales

1. arboledas como cubierta natural o sombrío de cultivos – hasta la etapa anterior a la propulsión por las trasnacionales del monocultivo en varios productos se usaron arboledas con un doble propósito: atenuar el impacto de los rayos del sol sobre la planta y generar un 'microclima' húmedo y propicio biologicamente

En el caso típico del café colombiano (arábigo) se usaron los guamos en variedades diversas que no son maderables y con las 'descumbras' adecuadas propician esos procesos biológicos superficiales y subterráneos que derivan en la formación de una rica cama de hojarasca o humus que favorece la fertilización natural mediante absorción desde las raíces y cataliza todo un complejo biológico o micro-mundo de vida orgánica

El arábigo, que aún se cultiva en algunas regiones, en detrimento de la calidad de sus granos fue sustituído por otras variedades que brindan la cantidad 'necesaria' al mercado trasnacional pero afectan en negativo al pequeño/mediano productor pues hace forzosa la inclusión en la ecuación productiva de los 'insumos' agro-químicos y somete al agricultor a un círculo vicioso por el cual... la cantidad producida y sus 'ganancias' dependen del uso de la dosis 'recomendada' de agro-químicos

El miedo a dejar de lado los agro-químicos -que algunos denominan como síndrome monsanto- hace que algunos productores teman a la forzosa baja de sus ingresos en un breve período de transición hacia la fertilización biológica... y el instrumental tecno-político de las entidades se encarga de que ese factor resulte eficiente para desmovilizar múltiples iniciativas de cambio

En ese sentido se ocultan los cálculos económico-productivos que antes del mediano y largo plazo redundan en la recuperación con creces de los ingresos perdidos en la etapa de transición... pues los agro-químicos sí pueden/deben desaparecer de la canasta de insumos/costos del productor, en virtuosa aplicación de las lógicas mencionadas del Buen Vivir y la soberanía alimentaria para el real desarrollo agrícola territorial

2. manejo de plantas benéficas (malezas) para fertilización, mantenimiento de humedad y control de plagas – otra práctica complementaria consiste en el manejo de plantas asociadas benéficas o 'malezas' que contribuyen al soporte de la humedad en el piso y además participan en el control biológico de plagas sobre los cultivos

Su control manual y/o mecánico enriquece la cubierta natural de vida orgánica en putrefacción que protege el piso y favorece el desarrollo del proceso micro-biológico mencionado en el punto anterior – Se trata también de restablecer el equilibrio que ocurre en la naturaleza y que hoy se presenta bajo los conceptos de permacultura para dejar que la naturaleza funcione bajo sus propios principios

En esas prácticas permaculturales se incluye el manejo de aves de corral (gallinas y patos) que bajo ciertas condiciones de control participan en forma caótica al proceso microbiológico aludido

3. cultivos intercalados en diversidad y asociación para hacer frente al monocultivo – En la economía del Buen Vivir (por la soberanía alimentaria y el cuidado ambiental) es obvio que pierde la validez 'absoluta' que se otorga al uso de agro-químicos bajo la visión actual del mono-cultivo... entonces entran a jugar otros cálculos que derivan de ecuaciones diferentes porque privilegian los valores ecologistas pero al tiempo echan al viento el fantasma de los agro-químicos que algunos expertos asocian al uso de esos elementos en el incremento ganancial

aparente efecto de los agro-químicos en la alimentación mundial

Para los pequeños/medianos productores del agro, el uso de esos agroquímicos ha significado su empobrecimiento y quiebra gradual... han quedado literalmente por fuera del sistema globalizado y de eso dan cuenta las estadísticas oficiales en los sistemas agrarios de los países dependientes

Esas estadísticas reflejan que los agroquímicos 'operan' en los sectores que controlan las trasnacionales (soja, maíz y otros) al precio de depredar en lo social y en lo productivo las sociedades de los países dependientes y de poner en riesgo la vida misma del hombre en el planeta

Esa conflictiva exclusión puede/debe convertirse en argumento válido y definitivo para iniciar e impulsar desde diversas plataformas sociales y comunitarias, y en diversos ámbitos territoriales el urgente proceso de reconversión al sistema de producción basado en los potenciales biológicos de la naturaleza que se encargó de eclipsar -transitoriamente- la tecnología y las políticas trasnacionales

Los saberes ancestrales de las comunidades campesinas, indígenas, negras y de agro-descendientes, ejercitados a nivel campo/ciudad tienen la solidez necesaria y suficiente para decir un no rotundo a los agro-químicos... es base de los objetivos del Buen Vivir que en general busca restablecer equilibrios ambientales arrebatados a la naturaleza

Las diversas comunidades -unidas tras ese objetivo común- tienen a su haber esos saberes ancestrales y en sus manos la sencillas pero valiosas herramientas requeridas para labrar, afianzar y ensanchar la soberanía alimentaria que todo el planeta requiere...

No está demás recordar que, en resistencia y con varios vientos en contra, son los pequeños/medianos productores agrarios los que aportan casi el 70% de los alimentos que consume el mundo... pues los demás (transgénicos en buena parte) están desviados por las trasnacionales básicamente hacia los sectores energético y de alimentación para animales en los países industriales

Algunos especialistas sostienen que la cruda realidad del sector agrario así como de la desigual situación alimentaria a nivel global y en los países dependientes sólo podrá ser superada mediante las múltiples acciones empresariales, comunitarias y familiares que abandonen el uso de agro-químicos y así den pequeños y sencillos avances hacia la construcción de soberanía alimentaria...

Y de paso las comunidades en dinámica diversa hagan su contribución -como corresponde- al cuidado del planeta, pues esa materia no puede ni debe quedar en manos de entidades gubernamentales u ong's, sin peso para hacer frente al poder de las transgresoras empresas trasnacionales... esto último a raíz de la más reciente Cop21 sobre el Cambio Climático realizada (en dic2915) en París con apenas 'inciertos resultados'

- Las iniciativas mencionadas apuntan a la recuperación del campo colombiano para la construcción de un nuevo país sin miseria ni exclusión, en el contexto mundial y mediante el desarrollo endógeno para el Buen vivir - ema